21 octubre de 2024
Prot. N° 66/24/481 Prayers
A los Priores Provinciales y Viceprovinciales,
A todos los hermanos.
Queridos hermanos:
¿Y cómo pueden oír sin alguien que les predique? (Romanos 10:14) Es cierto que toda vocación es un misterio. Es Dios quien llama y envía obreros a la mies. Pero aquellos a quienes Dios llama necesitan “escuchar más claramente” el llamado de Dios. El profeta Samuel necesitaba al sacerdote Elí para entender el llamado de Dios.
Una de las tareas importantes de todo fraile, no solo del Promotor de Vocaciones, es invitar y acompañar a aquellos a quienes Dios llama a ser dominicos para que conozcan y comprendan más profundamente la “voz” de Dios. Esto presupone, por supuesto, que nosotros mismos estemos familiarizados con esa voz, una “familiaridad” que se nutre de la vida dominicana que vivimos. Invitamos a la gente a unirse a los frailes (en particular) y a la Familia Dominicana (en general) porque queremos compartir con ellos la alegría de predicar el Evangelio, queremos compartir con ellos el tesoro de la vida dominicana.
Los últimos Capítulos Generales han pedido que la promoción de nuevas vocaciones sea una de nuestras prioridades, y que se destinen los recursos personales y materiales necesarios para este trabajo. Puesto que el Señor mismo nos dice “que roguemos al dueño de la mies que envíe obreros a su mies” (Mt 9:38), uno de nuestros deberes importantes en la promoción de las vocaciones es orar. En cumplimiento de ACG Tultenango (2022) 189, fr. Juan Manuel Hernández Hernández, Socio para la Vida Fraterna y la Formación, y la Comisión Litúrgica de la Orden, han preparado una Oración por las Vocaciones en los idiomas oficiales de la Orden, que les presentamos. Aprovechamos esta oportunidad para recordarles la ordenación del Capítulo General:
190. [ORDENACIÓN] Ordenamos que los priores aseguren la recitación diaria de una oración por las vocaciones en común, adoptando la oración encargada anteriormente si aún no está en uso.
Al orar juntos por las vocaciones, tengamos presente que:
- Rezar por las vocaciones dominicanas debe llevarnos a un mayor compromiso con el Señor que nos ha llamado.
- Rezar por las vocaciones dominicanas implica promover activamente el carisma dominicano a los jóvenes, animando y acompañando a aquellos que se sienten llamados;
- Rezar por las vocaciones dominicanas significa también hacer visible el carisma dominicano, para que aquellos que han escuchado el llamado de Dios a la Orden también puedan verlo más claramente;
In Domino et Dominico,
fr. Gerard Francisco Timoner III, OP
Magister Ordinis
Oratio pro vocationibus ad ordinem praedicatorum
Domine Iesu Christe,
qui ad Evangelium praedicandum
sancti Dominici familiam in Ecclesia convocasti,
suppliciter te rogamus,
ut operarios in messem tuam mittere digneris;
fortitudinem, sapientiam gratiamque omnem iis tribue,
ut te mortuum, resurrectum et in gloria venturum
digne coram hominibus confiteantur.
[Mariae sacratissimae,
cuius sub patrocinio Ordo noster permanet,
intercessione concede,
nos propugnatores esse fidei
lumenque dispellens indifferentiam et peccati tenebras.]
Qui vivis et regnas in saecula saeculorum. Amen.
Señor Jesucristo,
tú que reuniste a la familia de santo Domingo en tu Iglesia
para predicar el Evangelio,
te pedimos humildemente
que por tu bondad envíes obreros a tu mies
y les concedas toda gracia y sabiduría
para proclamar dignamente
tu muerte, resurrección y venida gloriosa.
[Que tu orden persevere bajo el patrocinio
de la Santísima Virgen María,
concediéndole por su intercesión
ser verdaderos campeones de la fe,
y de la luz que disipa las tinieblas
de la indiferencia y del pecado].
Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.