En la Pauluskerk de Amberes (Bélgica), repleta de arte de siglos pasados, se descubrió el sábado 7 de mayo un “nuevo santo Domingo”, realizado por el pintor holandés Egbert Modderman.
El cuadro es un regalo de los laicos dominicos a los hermanos de la nueva provincia de Bélgica y los Países Bajos, que se erigirá formalmente a finales de mayo. El Prior de Amberes fray Didier Croonenberghs, OP descubrió el lienzo del tamaño de un hombre, junto con los dominicos laicos Karin Bornhijm (NL) y Tommy Vandendriesche (B). Fue el broche de oro del día de estudio de los dominicos laicos holandeses y flamencos, con un centenar de participantes.
El cuadro muestra a santo Domingo limpiándose los pies antes de ponerse los zapatos, justo antes de entrar en una ciudad. Fue creado como resultado del proyecto “Leven in Volheid” (en traducción: “Vida en plenitud”. En este proyecto, que lleva el nombre del libro traducido de fray Timothy Radcliffe, OP (título en inglés: Alive in God), doce artistas y miembros de la familia dominicana se reunieron en torno a la imaginación cristiana. En el proceso crearon danza, música, teatro y otras artes.
El joven pintor, de fama internacional, Egbert Modderman fue invitado por el profesor de teología y dominico laico Stephan van Erp a trabajar juntos. Le pidió al pintor que creara una nueva imagen de Santo Domingo. Mediante el crowdfunding, una importante contribución personal y una donación de la provincia holandesa se pudo realizar el cuadro.
En la presentación, Egbert Modderman dijo que había notado con cuánto afecto las hermanas y hermanos dominicanos hablan de su fundador, que nunca se puso en primer plano y que, como dijo el historiador dominicano Anton Milh, a menudo era estricto consigo mismo pero suave con los demás.
Modderman quería pintar la dulzura, la contemplación y la terrenalidad del santo hermano mendicante. Le llamó la atención la historia de que a santo Domingo le gustaba viajar descalzo, pero se ponía zapatos cuando entraba en una ciudad.
En la inauguración del lienzo hubo un fuerte aplauso. El pintor Modderman, que se dio a conocer por su representación de San Martín para la Martinikerk protestante de Groningen, también indicó que estaba realmente satisfecho con la obra. La gente describió la obra como conmovedora, engañosamente sencilla, que señala un camino.
El cuadro está ahora en Amberes y encontrará su destino.
